El clásico del futbol peruano realizado en el estadio Monumental, generó grandes expectativas, sin embargo se tornó pesado, desganado y hasta aburrido.
Ayer se realizó el famoso clásico entre los equipos de Universitario de Deportes y Alianza Lima; días antes de la realización del mismo, las expectativas eran abundantes y generaban emoción entre todas las personas amantes del deporte rey. Las entradas para ver el encuentro entre los dos equipos más famosos del Perú, se vendían como pan caliente y se agotaron en cuestión de días.
LLEGÓ LA HORA.- A las 4:00pm se inició el encuentro dirigido por el árbitro Víctor Hugo Carrillo, la tribuna Norte se encontraba repleta por hinchas cremas, coreando canciones para dar ánimo y confianza a su equipo; en el otro extremo, la tribuna Sur hacía lo suyo o tal vez poco, apoyando a los blanquiazules. Las tribunas de Oriente y Occidente también albergaban a hinchas de ambos equipos.
En este clásico hubo de todo, hinchas cantando canciones alusivas a su equipo hasta más no poder, emoción, picardía en algunas jugadas, expulsados, penales y hasta bronca, que más parecía una batalla campal entre hinchas blanquiazules y la policía, sin exagerar.
En la primera mitad del encuentro el partido le favoreció a los merengues, que dominaron a su antojo a un asustado equipo aliancista. Las jugadas hacían esperanzar a los fanáticos de ambos equipos, que esperaban ansiosos el plato principal de cualquier partido “El Gol”, para romper sus gargantas gritando esa bendita palabra que es el sueño de todo hincha.
Al término del primer tiempo, los ánimos se encontraban tensos entre la tribuna norte y sur; y pasó lo que se temía, hinchas cremas comenzaron a insultar y lanzar objetos a barristas contrarios, y la respuesta no se hizo esperar por estos últimos que respondieron quemando papeles, pancartas, y hasta las sillas del estadio, lanzándolas hacia la tribuna norte, con esto los policías hicieron su debido trabajo, empezaron a poner orden entre ambos bandos, sobretodo en la tribuna sur, que se encontraba repleta por vándalos aliancistas. Por suerte no hubo pérdidas humanas que lamentar en esa trifulca.
En la segunda fracción, a los 54 minutos llegó un penal a favor del cuadro crema; el encargado de ejecutarlo fue Piero Alva, quién en ese momento no se encontraba con sus cinco sentidos en el partido y la mala suerte lo acompañó. Desde los doce pasos, Alva patea el penal….¡Penal fallado!, el arquero Libman se convirtió en el salvador de los “monos”; que con la punta del pie izquierdo pudo sacar la pelota, esto causó indignación y molestia para todos los hinchas que le lanzaban adjetivos subidos de tono, no era para menos.
Con el trascurrir del partido todo se volvió tedioso, aburrido y los jugadores cremas con un hombre menos jugaban desmoralizados, pues con ese penal errado, hubieran estado más tranquilos y tendrían la victoria entre sus manos. El equipo de la victoria tuvo algunas claras de gol que no pudieron concretar; juego va y juego viene, así se pasó el segundo tiempo; finalizó el encuentro y el empate a cero con sabor a derrota para ambas escuadras, acabó con las ilusiones de obtener el título del futbol peruano.
Para finalizar, cabe mencionar que después del partido, Jose "Chemo" del Solar visitó los camerinos del equipo blanquiazul para saludar a su colega Gustavo Costas.
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